Unknown On domingo, 20 de enero de 2008 At 19:57

Manga 'Made in Barcelona'

  • La historia de Kamikaze Factory empezó con un "fanzine"
VANESSA G. FERNÁNDEZ
Uno de los dibujos de este grupo de creadores (Foto: Kamikaze Factory)

Uno de los dibujos de este grupo de
creadores (Foto: Kamikaze Factory)

BARCELONA.- Literalmente significa "dibujos caprichosos" o "garabatos". El manga llega a la ciudad de la mano de los jóvenes creadores de Kamikaze Factory. Su historia empezó con un "fanzine", han ido creciendo y ahora diseñan al estilo nipón desde latas de chupa-chups y "flyers" a portadas de CD. La epidemia manga se ha dejado notar especialmente en Barcelona, que se ha convertido en punto de encuentro de los "otakus".

Cada año, el Salón del Manga -que lejos de traerle mala suerte ya va por su XIII edición- congrega aficionados de todo el país, que no dudan en ir disfrazados de su personaje favorito y participar en el concurso de "cosplay". Y fue en un lejano Salón del Manga donde se conocieron muchos de los miembros del primer estudio de ilustración y diseño manga de España: Kamikaze Factory (KF).

"Porque es un poco suicida meterse en un estudio de manga", ironiza su coordinador Rubén García. Los chicos de KF son diseñadores gráficos y dibujantes que aplican el estilo japonés a todos sus trabajos. Pero dan un paso más allá: fusionan la estética nipona con las tendencias más urbanas, el pop art, la animación, el cómic europeo y los videojuegos.

Gracias a KF, incluso las latas de chupa-chups tienen un toque manga, con unas simpáticas y coloridas frutas estilo "kodomo" (infantil). "La ilustración tipo Tim Burton es lo que hace todo el mundo. Nosotros preferimos el manga. Eso sí, dándole un toque más urbano o pop... Hacemos que evolucione, como ocurre en Japón, y que no se quede anclado en lo clásico", explica Rubén.

La historia de los suicidas de KF empezó a escribirse en un "fanzine": Sugoi Magazine. Para cuando llegaron al cuarto número el equipo de Sugoi ya se había transformado en Kamikaze Factory.

Una factoría que congrega a una decena de suicidas, repartidos por toda España y conectados por la red. Pero el núcleo central está en Barcelona: Eli Basanta (chica para todo, capaz de dibujar cualquier cosa en cualquier estilo), Pau Gámez (le va el trazo europeo), Laura Palmer (también europeísta, en un momento crea monigotes de la nada), Míriam Álvarez (toda una experta en shojo, dirigido a chicas), Rubén García (ejerce de guionista y director de arte), Aneu Martínez (kodomo) y Bénelo Nsé (un canario al que le va el kodomo y dibujar mascotas).

Todos ellos luchan por sacar el manga de su estigma: "Muchos lo asocian a la violencia y creen que es malo, maligno. En realidad, el manga aboga por la tolerancia y en ningún otro lugar encuentras una variedad tan rica de estilos, temáticas y texturas", afirma Àneu.

Esa sensibilidad hacia el género les viene desde la más tierna infancia: "Aquí mamamos manga desde pequeños", recuerda Rubén. TVC tuvo parte de culpa de esa afición por lo japonés en Cataluña al programar series como "Dr. Slump", "Evangelion", "Dragon Ball", "Candy Candy" o "Ranma", entre otras. Han sido los clásicos que marcaron a la generación que ahora lo crea.

http://aula.elmundo.artempus.es/noticia.cfm?idTipoPortada=1&general=0&idComunidad=4&idPortada=32&idNoticia=2493

(c) elmundo.es

1 comentarios:

Don_Mingo dijo...

Jue, mira que a mi no me gusta nada el estilo manga... pero ante esa ilustración uno se quita el sombrero, es una pasada el dibujo, trazo... y sobre todo el color!